De hecho, éste curso es la base filosófica sobre la que se asientan el resto de mis cursos, desde el de Psicología Astrológica hasta el de Meditación, pasando por la Numerología y la comprensión de los Chakras o los Rayos.
Es prácticamente imposible asesorar a otra persona de manera correcta y profunda sin conocer claramente quienes somos, de dónde venimos y cual es nuestra meta, tanto a corto plazo, para esta vida, como a largo plazo, en nuestra evolución futura.
Si lo único que se quiere es tener conocimiento de cómo es nuestra personalidad y qué acontecimientos pueden pasar en un futuro próximo en nuestra vida, es suficiente con aprender astrología clásica.
Pero si queremos saber cómo cambiar nuestra vida, nuestro destino, nuestro futuro, tenemos que conocer nuestras raíces, de dónde venimos y eso sólo lo aporta la Astrología en su vertiente kármica.
Si queremos aprender a ser felices tenemos que llegar a sentir que estamos haciendo lo que de verdad queremos hacer de manera profunda, lo que nos llena, y eso sólo es profundo si conocemos, aunque sea superficialmente, nuestra alma, nuestro ser interno y qué es lo que quiere hacer en esta vida. En resumen qué es lo que hemos venido a hacer en esta vida y porqué hemos nacido.
Y, otra vez, esto sólo nos lo aporta la vertiente espiritual de la Astrología y la Numerología. Y los 7 Rayos.
Resumiendo pues, si quieres aprender la enseñanza básica puedes contentarte con la Astrología clásica, la Numerologia normal, etc.
Pero si quieres ir a la universidad y sacarte el título necesitas profundizar más con las herramientas que te lo permiten.
Y, si además quieres el doctorado, entonces tienes que formarte en la Sabiduría, lo que te permitirá alcanzar ese conocimiento profundo que te hace intuir la razón de todas las cosas que suceden.